miércoles, 19 de junio de 2013

CARTAS A CENICIENTA

Nuestros compañeros de un centro rural del La Ina idearon una actividad a la que llamaron "Cartas a Cenicienta", para practicar la escritura de la carta formal y la carta informal, así como muchos valores, entre los que la coeducación tiene parte destacada.

Propuse la actividad a mis alumnos de 1º de ESO y pareció gustarles la idea.

La situación de partida es la siguiente: tras pasar toda la noche bailando con el príncipe, cuando van a dar las doce Cenicienta huye; sin embargo, en lugar de volver a casa, desparece y no se vuelve a saber de ella. Cada uno de los personajes del cuento intenta ponerse en contacto con ella: algunos, para pedirle que vuelva; otros, para que no regrese; unos, en tono formal, según su condición social y relación con Cenicienta; otros, en tono informal y cariñoso.

Para hacer esto hay que repartir entre todos los alumnos un papel: Madrastra, Hermanastra, ratoncitos, pajaritos, Príncipe, Rey, Zapatito de cristal, Hada Madrina, Calabaza, Lacayo del Príncipe, Lucifer (el gato)...

Cenicienta tendrá que contestarles a todos y así se iniciará una relación epistolar que nos desvelará muchas claves del cuento hasta llegar al final que queramos.

Aquí os dejamos algunas de nuestras cartas:

 
Cenicienta:


Bidibadibadibuuu (aparezco a tu lado).
Hola, Ceni, debes ir al palacio el rey está muy preocupado, más o menos, pero eso no importa, tú solo debes ir al sitio ese con tantas florecitas y eso... El rey me dio esta nota para que tú la leas:
Palacio el 03/08/2013
Muy buenas, Su Majestad, le envío este poema para saber cómo está:
Princeso:


Princesa, sin saber
Cómo estás, tú debes
Saber que yo no sé
Dónde ni qué haces.
Podrías contestarme
A sólo esta carta que
Di a la hada esa de
Las 372 que envié.


Ta' luego Ceni
El Príncipe Juan Carlos III
(PD: Te quiero, churri)
Solo eso, mi reina, y que yo, como tu hada madrina, debo llevarte al castillo y te doy unos días para que te lo pienses.


Hasta pronto:


El Hada Madrina



Un lugar que no revelaré, 10 de junio de Érase una vez.

Querida Hada Madrina:

Como Hada Madrina mía, me sorprende que quieras llevarme al castillo. ¿Es que no me conoces después de todos estos años? Jamás iré: siempre he soñado con ser libre y ahora por fin lo seré.
Mi “Princeso”, como puedes ver en mi poema, querría tenerme encerrada en su palacio llamándome churri. ¡Antes la muerte! Siento que el rey esté preocupado, parece una buena persona, pero necesita una nuera más convencional.
Sólo echo de menos a mis amigos los ratoncitos y los pajaritos, que siempre me han dado cariño. También te echaba de menos a ti, pero si tu deseo es obligarme a ser princesa, jamás me encontrarás.

Tu ahijada,

Ceni.

9-6-2013 San Roque
Estimada Sra. Cenicienta:

Le escribo para decirle que… DÓNDE ESTÁ, todos la andan buscando y yo, no es por alarmarla, pero al final el príncipe se casará con una de sus hermanastras o con su madrasta. El pobre está preocupadísimo, casi no se puede mantener en pie…

Un saludo de mi parte… Atentamente:

El criado del príncipe.


(P.D.: Por favor, atienda a mis súplicas, queridísima princesita… )




By: MARÍA ELENA GARCÍA GALEA 1ºA


Un lugar que no revelaré, 10 de junio de Érase una vez.

Estimado lacayo:

Comprendo su preocupación, pero debe usted saber que me encuentro bien de salud y que no vuelvo a palacio porque allí no está la vida que yo deseo. Siento preocuparles, pero deben respetar mi derecho a ser feliz.

Atentamente,

Cenicienta




Un lugar que no revelaré, 10 de junio de Érase una vez.

Querido Pajarito 1:

Gracias por avisarme del peligro. Siempre os habéis preocupado por mí y me habéis cuidado, y por eso os quiero tanto.
No te molestes en pedirle nada a mi Hada Madrina: no me comprende y sólo quiere que vuelva a palacio para que sea reina y me muera de aburrimiento. Cuando consiga estar bien establecida aquí, os mandaré a buscar, si es que queréis venir conmigo. Os echo mucho de menos.

Un besito,

Ceni.



Un lugar que no revelaré, 10 de junio de Érase una vez.

Maltratadora Madrastra:

Aunque veo que no lo comprende (la inteligencia emocional nunca ha sido su fuerte), me trae al fresco que la casa esté como un vertedero. Espero que en él puedan revolcarse mis hermanastras y usted, así se parecerán más a lo que realmente son: basura.
Sus amenazas no me hacen ningún efecto, así que no pienso volver. Quizá un poco de cariño sí hubiese tenido efecto, pero veo que sigue siendo incapaz de mostrármelo.
Hasta nunca,

Cenicienta



Un lugar que no revelaré, 10 de junio de Érase una vez.

Querido príncipe:

Me siento muy mal por el malentendido que veo que se ha producido entre nosotros. Lo que para ti fue una “noche loca”, para mí fue un peñazo. Se lo conté todo a mi padre: cómo querías que me quedase a vivir en el palacio para bordar tu retrato, tener muchos herederos para la corona y comer perdices (¡las odio!); por eso notas que no te quiere en la familia: él me conoce muy bien y sabe que me harías infeliz, ya que yo sólo quiero ser libre y, cuando me enamore, hacerlo de alguien que me respete y me deje ser quien yo quiera ser.
Mis hermanastras estarían encantadas con tus planes y quizás deberías reconsiderar sus peticiones.
No te lo tomes a mal: eres muy mono y muy dulce (quizá demasiado)y besas muy bien, pero somos muy diferentes y no seríamos felices juntos. Sé que conseguirás serlo sin mí.

Te aprecia,

Ceni


Un lugar que no revelaré, 10 de junio de Érase una vez.

Malvado Lucifer:

Si de cambiar tu arena para gatos no se preocupan tus dueñas, quizá es que no te quieran como deberían... Yo hace ya tiempo que me di cuenta de que en esa casa no me trataban bien y por eso decidí marcharme.
No creas que me asustan tus amenazas: que tus dueñas se quedaran con el príncipe es algo que no me quita el sueño (aunque lo compadecería) y jamás conseguirás comerte a mis amigos los ratoncitos y pajaritos, ya que estás demasiado gordo y ellos son muy listos y rápidos.

Yo no te desprecio y te deseo lo mejor, ya que en la vida cada uno da lo que tiene.
Hasta nunca,
Ceni.