viernes, 18 de noviembre de 2011

El texto narrativo: ejemplos creativos.

Una actividad que realizamos en clase y que generalmente os gusta mucho es, siguiendo algunas de las ideas de Gianni Rodari en Gramática de la fantasía, reescribir un cuento clásico haciendo una serie de cambios que lo hacen muy divertido:
* Invertir la función de los personajes: convertir a  los protagonistas en antagonistas y viceversa.
* Incluir un elemento extraño en el marco (espacio o tiempo).
* Incluir un elemento rechinante (algo que no podría existir jamás en un cuento clásico).
* Usar un narrador interno (en 1ª persona).

Aquí tenéis el cuento creado por la alumna Carmen Frías, de 1º de ESO A, como ejemplo (¡me encanta!).  Y todos mis demás alumnos de 1º de ESO han escrito también cuentos muy graciosos. Enhorabuena a todos.


 La encantadora brujita y la sirenita tonta

Mi relato empieza una mañana de verano en un lugar dejado de la
mano de Dios en el océano Pacífico.
Vivo en las profundidades de un acantilado submarino junto a
mis hermanas y a mi padre.

Pertenecemos a una antigua dinastía de hechiceras del mar.
Aunque todas la historias dicen que yo soy , por el hecho de ser
bruja , la mala de esta historia , os juro por mi “ Iphone” que es
mentira.

Yo he sido la que ha salvado al príncipe (dándole un chaleco
salvavidas) . En contra de lo que la gente cree , lo que la sirenita
pretendía era dejar que se ahogase y se convirtiera en aperitivo
para tiburones.

Yo creo que era solo puro interés para conseguir alimento pa-
ra su restaurante de comida rápida.


Así que la sirenita y yo negociamos para ver quién se quedaba
con el príncipe. Ella , como es muy envidiosa , solo quería al prín-
cipe porque también lo quería yo. Pero como llega a serlo tanto ,
hasta el punto de tonta , yo le saqué 4523 monedas de oro por el
príncipe.

Ella se habría quedado con el príncipe , pero yo conseguí
una tele de pantalla plana , y además , en la revista “ ¿Quién es
ese pez? ” dijeron que mataron a la sirenita y la sirvieron como
postre en palacio .
Y el príncipe vivió feliz , como yo  y sirvió las perdices junto
a LA SIRENITA